¿Cómo afecta el tabaco al colesterol?

Cuando pensamos sobre lo malo que es fumar, habitualmente lo primero que nos viene a la cabeza es su estrecha relación con el cáncer del pulmón. Sin embargo, el tabaquismo tiene otras muchas consecuencias negativas para la salud que a veces olvidamos o pasamos por alto. Como por ejemplo, su capacidad para aumentar nuestros niveles de colesterol.

Desde hace años la relación entre fumar y el colesterol ha quedado fuera de todo duda para la comunidad médica. Todos los expertos coinciden en que el tabaco disminuye el nivel del colesterol HDL o colesterol bueno, lo que provoca el aumento de la proporción del malo o LDL.

Así, según diversos estudios, los fumadores tienen tres veces más riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular que el resto de la población.  Dos son los factores  por los que lo el tabaco produce ese impacto negativo en nuestra salud cardiovascular.

  • Nicotina: Desencadena la liberación de catecolaminas (adrenalina y noradrenalina) que ocasionan daño a la pared interna de las arterias (endotelio), sube el tono coronario con espasmo, produce alteración de la coagulación, incrementa los niveles de LDL (colesterol malo) y reduce los de HDL (colesterol bueno).
  • Monóxido de carbono: Disminuye el aporte de oxígeno al miocardio, aumenta el colesterol y la agregabilidad plaquetaria (su capacidad de unirse y formar coágulos).

En caso de que seamos fumadores, deja de fumar tendrá un efecto muy rápido y positivo sobre nuestro colesterol, rebajando el malo e incrementando el bueno. Tal y como se pudo observar en un reciente estudio realizado con un amplio grupo de exfumadores.

Por lo tanto, si te preocupa el colesterol, ya tienes otro motivo más para dejar de fumar. ¡Ánimo que seguro que puedes!

2020-05-29T10:57:31+00:00